La lucha de Siky Osama Jr.

*Con 22 años de carrera como luchador, este rudísimo del ring tiene otra labor cuando se acaba la función, la producción y venta de accesorios para mascotas, que es el negocio con el que ha subsistido su familia durante varios años.

Antonio Zamora

Puebla.- “Yo soy el mejor luchador de Puebla y se lo demuestro a quien sea”, es el grito de guerra de Siky Osama Jr.  durante una lucha de los lunes de Arena Puebla, donde ha tratado de seguir con el legado de su padre, Siky Osama, quien lo impulsó desde muy pequeño.

El diseño de su máscara muestra una luna junto al sol, sus botas siempre rojas y la licra para luchar, mientras que cuando es su entrada por la pasarela, acostumbra colocarse una larga capa morada de terciopelo para engrandecer más su figura.

“A los siete años empecé a practicar lucha olímpica, grecorromana y colegial, y a los 11 años ya comencé con las competencias a nivel nacional, a los diecisiete años a entrenar lucha profesional y fue hasta los 19 años que mi papá premió mi esfuerzo llevándome a entrenar a la Arena Puebla. Mi debut el 2 de febrero del 2000 me presenté como luchador profesional”.

Para cumplir el sueño de presentarse en la catedral poblana de pancracio tuvo que sufrir la dura enseñanza de la lucha libre clásica con el rigor de los antiguos maestros que no daban ningún tipo de concesión a pesar de la novatez y la juventud de los alumnos.

“Los profesores de antes, la lucha de antes, era muy difícil porque te enseñaban a base de golpes, a base de entrenamientos fuertes, excesivos, que muy poca gente los podía aguantar y solo los que lo aguantaban tenía la oportunidad de convertirse en luchador”.

Su estirpe le ayudó a comenzar a sobresalir abriéndose panorama no solo en la Arena Puebla, sino también en otras partes del país, en las que su nombre comenzó a sonar cada vez más fuerte.

“Empecé a ir a funciones a Ciudad de México, a otros estados de la República, después de siete años de estar en la Arena Puebla, comencé a luchar en otras partes, y empecé a hacerme más de un nombre”.

Con el paso de los años, su carrera explotó y eso le facilitó presentarse en los mejores recintos de lucha libre en el país como la Arena México y la Coliseo en Ciudad de México, siendo estas última las que más lo marcó.

“En estos veinte años de luchador, las contiendas que más recuerdo ni siquiera son mi debut como profesional o en la Arena México, sino una de las que me dejaron marcado fue cuando debuté en la Arena Coliseo de Ciudad de México, porque la magia que existe ahí es muy diferente, eso hizo un evento memorable que me quedó grabada el resto de mi vida”.

Con la lona recorrida que tiene en las últimas dos décadas, Siky ha tenido rivales de primer nivel, pero uno de los más complejos fue la contingencia derivada de la pandemia, la cual lo dejó espaldas planas por la suspensión de las funciones, pero que al mismo tiempo lo obligó a reinventarse.

“Antes de la pandemia ya tenía asegurada presentaciones para dos meses, pero después todo se canceló y me quedé sin nada. Eso lo aproveché para retomar el negocio familiar, nosotros nos dedicamos a la producción y venta de accesorios para todo tipo de mascotas, le vendemos a los acuarios, veterinarias, tiendas de mascotas, no solamente a nivel local, tenemos muchos clientes de distintos estados y aquí en Puebla vienen a visitarnos de muchos municipios”.

Siky Osama Jr. tiene que hacer su lucha arriba y abajo del ring, ahora ya es un constante en las funciones no solo de la Arena Puebla, sino de diferentes promotoras locales, y es que si bien su gran sustento son los accesorios para mascotas, su vida gira alrededor de ‘Doña Lucha’, esa en la que encuentra emociones que en ningún lado.

“Hace tiempo le dije a mi mamá que lo que más disfruto de luchar es que me mienten la madre y me mandó al carajo, el aficionado vive una magia muy especial al entrar a la arena, al ver a sus luchadores, al ver las luces, el sonido, ahora imagínate al luchador, el encontrarte con tus compañeros de profesión, con tu bando y luego en la pasarela ya para subir al ring, todo eso es una magia muy especial”.

 

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